Este mediodía, miles de trabajadores de la educación marcharon a la Legislatura porteña para oponerse al tratamiento de la reforma del estatuto docente.
Hoy, los gremios docentes porteños se movilizaron hasta la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires para rechazar la reforma del Estatuto Docente impulsada por el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, que recorta y segmenta la cantidad de titularizaciones de cargos de maestras y maestros en lo que se dio en llamar ley de «Fortalecimiento de la Carrera Docente».
El rechazo de los gremios a esta iniciativa presentada con el respaldo del Ministerio de Educación, que encabeza Soledad Acuña, se debe a que propone titularizar de manera excepcional a los docentes que al 31 de marzo de 2020 desempeñen cargos interinos en el nivel de educación media, mientras que las organizaciones sindicales proponen que alcance a más trabajadores de todas las modalidades.
Para Margarita Contarelli, Directora de escuela media y educadora del Bachillerato Popular Salvador Herrera de la CTAA Capital, éste día será una nueva fecha para recordar para el conjunto de los docentes de la Ciudad, ya que según sus propias palabras, “hace muchísimos años venimos resistiendo, luchando, soportando todos los embates de esta gestión que a planificado a largo plazo la destrucción del sistema educativo como tal y la re programación de lo que va a implicar ser trabajador o trabajadora para las nuevas generaciones, sin dejar un espacio de dignidad para nuestras niñeces”.
Así, una modificación que antaño demandaba reuniones, debates y tratamiento legislativo, hoy con mayoría casi automática, la gestión de Horacio Rodríguez Larreta viene a imponer su nueva manera de entender la educación, resumida en su último slógan: La transformación no para.
Continuando con su reflexión, Contarelli afirmó que “como el Gobierno no tuvo éxito con las propuestas de la UNICABA y entendiendo que todavía hay resistencia dentro del conjunto docente, ha propuesto ahora dos cargos nuevos que tendrán sus estudios dentro de dicha institución, con grandes renovaciones en el estatuto que profundizan los problemas de fondo y no resuelven nada”.
“Está claro que en educación se necesitan otros recursos y los pocos de que se dispone se vuelcan en espejitos de colores, en circo y globos, mientras que las transformaciones profundas que necesitan nuestras niñas, nuestros niños y nosotros en nuestra calidad de educadores, en nuestras condiciones de trabajo, siguen sin aparecer: titularizaciones en el área de media, inversión en educación especial y muchas otras situaciones que nos atraviesan, mientras ésta gestión va programando a largo plazo desgranar el sistema educativo, sobre cargándonos con tareas administrativas que nos distraen de nuestras cuestiones pedagogícas y, en este caso de los equipos de conducción, nos corren de nuestra función pedagógica, en el marco de ésta disputa por el conocimiento”, finalizó Contarelli.